Lo encontré en Popota, una de las heladerías que, con tan sólo tres meses de vida, promete ser en breve uno de los centros de peregrinación para los amantes de los helados creativos y de autor.
Con motivo del Día de los Enamorados han elaborado uno de vainilla y chocolate recubierto de fresa que si lo viera el propio Cupido se olvidaría de sus flechas al instante. Es, sin duda, la combinación perfecta para lograr el secreto de un gran amor.
Y amor, mucho amor por los helados es lo que vas a encontrar en Popota. Todo esta mimado hasta el mínimo detalle. Su estética años 50 te da pistas sobre lo que vas a encontrar allí: sabores “de película” capaces de enamorar a los paladares más exigentes.
Es difícil decantarse por un sabor en concreto ante tanta calidad. Yo os recomiendo que no os vayáis de allí sin probar los de croissant, dulce de leche o algarroba con avellana. Son verdaderamente espectaculares.
Y si quereis experimentar la quinta esencia pedir un perrito caliente helado, donde nada es lo que parece.
Detrás de todo este derroche de imaginación y profesionalidad están Antoni Solé, Irene Ravchuc y el chef heladero Jordi Guillem, subcampeón de la Copa del Mundo de Heladeria en Rímini, Italia.
Popota está en la calle Carranza 9 y próximamente inauguran nuevo local en el Mercado de la Cebada de Madrid.
I found it at Popota, one of the ice cream shop that, with only three months of life, promises to be soon one of the pilgrimage centers for lovers of creative ice creams.
Because Valentine's Day they have made one of vanilla and chocolate covered with strawberries that if Cupid himself saw it, he would forget his arrows instantly. It is, without any doubt, the perfect combination to achieve the secret of great love.
And love, a lot of love for ice cream is what you will find in Popota. Everything is spoiled to the smallest detail. Its 50s aesthetic gives you clues about what you will find there: “movie flavors" capable of making the most demanding palates fall in love.
It is difficult to choose a particular flavor with so many great ones around. I recommend you not to go away without trying the croissant, dulce de leche or carob with hazelnut ice creams. They are truly spectacular.
And if you want to experience the quintessence, ask for an ice cream hot dog, where nothing is what it seems.
Behind all this waste of imagination and professionalism are Antoni Solé, Irene Ravchuc and the ice cream chef Jordi Guillem, runner-up of the Ice Cream World Cup in Rimini, Italy.
Popota is on Calle Carranza 9 and soon they ´ll open a new store at Mercado de la Cebada in Madrid.