Los que conoceis la Cava Baja de Madrid os preguntareis cómo he podido fotografiar esta calle sin gente si, incluso en plena pandemia, normalmente aquí no cabe un alfiler. Pues me he ido un domingo temprano por la mañana (antes incluso de comprar el pan) y lo que me he encontrado es un barrio tranquilo, con una luminosidad radiante y un ambiente pre- primaveral que daban ganas de quedarse hasta la hora del aperitivo
Es verdad que a estas horas tan tempraneras todos los bares y restaurantes por los que es famosa esta zona están cerrados, pero es justo en ese momento cuando se capta la verdadera belleza de esta emblemática calle de Madrid.
Y es que la Cava Baja, en plena zona de cañas y vinos de La Latina, es la calle con mayor concentración de número de bares y restaurantes de la capital. Uno cada seis metros, 53 locales en tan solo 320 metros desde Puerta Cerrada hasta la plaza del Humilladero.
Ninguna calle tan corta tiene puerta de acceso a tantos bares y restaurantes como la vía del mítico Casa Lucio; incluso compite en número de locales con vías kilométricas como la calle Alcalá o el Paseo de la Castellana.
La afluencia de público ha ido variando al hilo de las modas. En la actualidad, y desde hace ya más de 15 años, a la Cava Baja acuden tanto madrileños como turistas a disfrutar del ambiente que ofrece uno de los templos del buen comer y beber en Madrid.
People familiar with Cava Baja in Madrid will wonder how I have been able to photograph this street almost empty of people if, even in the middle of the pandemic, normally is crowded. Well, I went there on a early Sunday morning (even before buying my bread) and what I found was a quiet neighborhood, with a radiant brightness and a pre-spring atmosphere that made me want to stay until snack time.
It is true that at this early hour all the bars and restaurants for which this area is famous are closed, but it is just at that moment when the true beauty of this emblematic street of Madrid is appreciated.
The fact is that the Cava Baja, in the heart of La Latina's beer and wine district, is the street with the highest concentration of bars and restaurants in the capital. One every six meters, 53 locals in just 320 meters from Puerta Cerrada to Plaza del Humilladero.
No other street so short has access to so many bars and restaurants as the street of the mythical Casa Lucio; it even competes in number of establishments with kilometer-long streets such as Alcalá Street or Paseo de la Castellana.
Visitors have been fluctuating as fashion trends have changed. Today, over the last 15 years, the Cava Baja is in a good moment of presence of Madrilenians and visitors from abroad. It is true that a good part of the neighbors complain about the noise and disturbance caused by so many places in so few meters, but let's focus on the positive side and enjoy one of the temples of good eating and drinking in Madrid.
Hasta 50 bares y restaurantes puedes contar a derecha e izquierda en un paseo por lesos 300 metros. Lamiak, La Potente, Casa Lucio, Taberna Los Huevos de Lucio, Cava Baja nº 5 (La Playa), Julián de Tolosa, Taberna Txacolina, Casa Lucas, La Chata y muchos más. Pocas calles del mundo pueden presumir de tal densidad tabernera como la Cava Baja.
Cuando vayas encontrarás que no son 50, sino alguno más o alguno menos. Pero siempre por ahí. Y donde antes tenías un bar ahora tienes otro. Y es que en esta calle los cambios son muy habituales.
A lo largo de la historia se han abierto y cerrado incontables establecimientos, casi todos relacionados con el comer y el beber (aunque también hay algunas galerías de arte y tiendas de souvenirs). Por ejemplo, la Posada de la Villa data de 1642. Y en el local donde ahora abre sus puertas Casa Lucio estuvo la Posada de San Pedro, que ya existía en 1720, y después el histórico Mesón del Segoviano.
En 2014 cerró definitivamente el bar restaurante El Schotis, que ofrecía platos castellanos desde hacía más de medio siglo. Hoy la mayoría de los bares son relativamente nuevos aunque todavía quedan algunos con solera. Y queda la tradición del público de ir rondando de bar en bar por toda la longitud de la calle.
Vayas el día que vayas siempre hay ambiente, sobre todo a mediodía y por la noche. Pero es durante el fin de semana cuando toda la calle se atiborra de gente, tanto para el aperitivo como en el tapeo previo a las copas. Hay tanto mogollón que parece que estemos en la plaza del pueblo en plena fiestas patronales. No me extrana que los que son de la zona suelan preferir la tranquilidad de un martes al jaleo de un sábado.
If you happen to be wandering around the city center, close to “Plaza Mayor”, or maybe close to the street market “Rastro” on a Sunday morning, you will for sure come across one of my all time favorite streets: “Cava Baja”. Urban legends say that this part of the city is where Arabs used to hide and then escape from Catholics when they took over Madrid centuries ago. That is one of the reasons, they say, it used to be filled with taverns. Some of that tradition remains intact until today because you will find bars, tavern-like restaurants but traditional restaurants as well, hostels, pension houses, flamenco bars, coffee places, a cinema lounge and one pharmacy. There are no regular shops on “Cava Baja”, but this one pharmacy is there.
It is a one way street for cars coming up to the “La Latina” district, but it is always full of people walking on the pavement. Restaurants and bars keep changing and evolving and they tend to up date their menus according to local festivities. I believe there are 2 special dates for you to keep in mind, the local holidays on August 15th and May 2nd to May 15th. August 15th is when the festivities of “Virgen de la Paloma” take place, right there in “La Latina” district, so probably you will never see it more crowded. Not even in May, when Madrid celebrates its annual local holiday. No special recommendations here, just come and enjoy the atmosphere.
Cuando uno camina por la Cava Baja en realidad anda sobre miles de toneladas de relleno. Se echaron hace cientos de anos encima del foso de 16 metros en el que moría la antigua muralla cristiana.El foso se cubrió con relleno; la muralla, o lo que quedaba de ella, con casas. Buena parte de la base de las dos fortificaciones que rodearon y defendieron la ciudadela medieval que fue Madrid, una árabe del siglo IX y otra cristiana del XII, permanece enterrada a lo largo de un perímetro que rodea aproximadamente. 900 hectáreas. Abarca desde la plaza de Oriente a la plaza de los Carros; desde ópera a la calle de Bailén.
Si alguien quisiera sacar la antigua fortificación a la luz no le quedaría otro remedio que poner patas arriba todo el centro de la ciudad. Por eso, sólo obras ocasionales -y a veces fortuitas- en viviendas o plazas logran, cada cierto tiempo, alumbrar. pequeños trozos de los muros que construyó el rey Alfonso VI tras arrebatar la ciudad a los árabes.
When you walk through the Cava Baja you actually walk over thousands of tons of fill. They were poured hundreds of years ago on top of the 16-meter moat in which the old Christian wall died; the moat was covered with fill; the wall, or what was left of it, with houses. Much of the base of the two fortifications that surrounded and defended the medieval citadel that was Madrid, one Arab from the 9th century and the other Christian from the 12th century, remains buried along a perimeter that surrounds approx. 900 hectares. It stretches from the Plaza de Oriente to the Plaza de los Carros; from Opera to Bailén Street.
If someone wanted to bring the old fortification to light, he would have no choice but to turn the whole city center upside down. For that reason, only occasional -and sometimes fortuitous- works in houses or squares manage, from time to time, to illuminate small pieces of the walls built by King Alfonso VI after taking the city from the Arabs.
Llevo puesta una cazadora de pana de BALENCIAGA, jersey de COS, pantalones de MANGO y botas de DAN JOHN
I am wearing a BALENCIAGA corduroy jacket, COS sweater, MANGO pants and DAN JOHN boots.
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